Trabajo sobre Mijas de Rocío y Anastasia

Historia de Mijas
La historia de este municipio se remonta a épocas remotas, siendo la prueba los restos encontrados en el cerro. Se cree que Mijas fue fundada por lo turdetanos con el nombre de Tamisa, que en sus orígenes fue una gran fortificacón situada donde hoy se ubica la iglesia parroquial y la plaza de toros. Era una población rica en metales preciosos y otros materiales , por lo que pueblos como los fenicios y los griegos se sintieron atraídos por este lugar. Mijas fue conquistada por los romanos, que siguieron extrayendo sus riquezas. Además, construyeron numerosos bancales y acequias, y plantaron las primeras viñas. Tras el derrumbamiento del imperio romano, la población fue conquistada por los visigodos y, posteriormente, por los árabes en el año 714. Los árabes convirtieron el nombre de Tarmina en "Mixa", que castellanizado es Mijas. Pasados siete siglos, fue reconquistada por las tropas cristianas en 1487, justo antes de que cayera el reino nazarí. Posteriormente, Mijas se convirtió en Capitanía General. Los cristianos llegados del norte para repoblar la zona se unieron a los musulmanes que decidieron permanecer allí. Fiel a Juana "La Loca" en la guerra de las Comunidades, Mijas recibió el título de Villa en 1512 y quedó libre del pago de alcabalas. Más tarde, la Corona le concedió el honor de la consideración de Muy Leal. A partir de 1492 se empezaron a construir las cuatro torres almenaras en el litoral para defender el territorio. Dos de ellas se encuentran en La Cala: la Vieja, la más bella y antigua, es de origen árabe. La otra, la Torre Penta Pesetos, es más moderna, ya que se construyó en el siglo pasado. La Torre Calaburra, que se encuentra junto a la punta del mismo nombre, fue construida en 1515. La Torre Calahorra es de forma cónica y data de 1497. En la actualidad, Mijas es uno de los municipios más extensos de Málaga, con 147 kilómetros cuadrados que se extienden desde la Sierra de Mijas hasta la orilla del Mediterráneo. El municipio se divide en tres núcleos: Mijas Pueblo, Las Lagunas y La Cala, además de algunas zonas rurales que aún conservan su entidad, como Valtocado, la Alquería y Entrerríos. Mijas Pueblo se sitúa sobre la ladera de la sierra, a unos 428 metros sobre el nivel del mar, lo que le ha permitido defenderse a lo largo de su historia. Su clima y situación han atraído a muchos extranjeros, los cuales han decidido desplazarse a la zona. Sin embargo, no son solo estos factores los que la hacen única. Su esencia de la Andalucía blanca, con las características rejas y flores, logran captar la atención de todos sus visitantes. Además, presenta muchos lugares de interés, como los restos de la muralla árabe que fue destruida en la Reconquista; la iglesia de la Inmaculada Concepción o la ermita del Calvario. También destacan parajes como el de la Sierra de Mijas donde, según cuenta la leyenda, la Virgen María se apareció a los pastores Juan y Asunción. Para conmemorarlo, en el interior de una gran roca se levantó un pequeño santuario conocido como Virgen de la Peña. En esta ermita se guarda la imagen de la patrona, tallada en madera en el año 850. Este mismo lugar, también llamado El Compás, tiene uno de los miradores más espectaculares de la localidad, desde el cual podemos admirar la belleza de la costa malagueña.
En cuanto al transporte, los visitantes pueden optar por los típicos "burros-taxis". El origen de este negocio se remonta a los años sesenta, cuando los trabajadores, al terminar la jornada laboral, regresaban con los burros a sus casas. Por el camino, estos se encontraban con turistas que les pedían subirse a los burros y hacerse fotos, por lo que empezó a surgir la idea de hacerlo un negocio. A finales de los sesenta, el Ayuntamiento de Mijas empezó a determinar el recorrido de los burro-taxis.
Mediante este curioso transporte, se pueden visitar lugares destacables como la plaza de los "Siete Caños", hasta la cual llegaba el agua de la Sierra. Otro de ellos es la plaza de la Libertad , donde antes se situaba el Ayuntamiento, convertido en los años noventa en el Museo histórico-etnológico. En él, se exponen los antiguos instrumentos de actividades ganaderas, agrarias o pesqueras, además de las creaciones artesanales y actuales de los mijeños. En el museo también podemos encontrar la antigua habitación del último alcalde republicano, Manuel Cortés, conocido como "el topo de Mijas" por estar escondido en ella más de 30 años.
En cuanto a la economía, Mijas vivía principalmente de la agricultura y la pesca, de algunas explotaciones ganaderas y de la extracción de minerales, que fue uno de los puntos fuertes de su economía. La fama de la provincia como exportadora de uvas, pasas y vinos se debe a que, en el pasado, las viñas de sus campos, junto a los de la Axarquía y los Montes de Málaga, tuvieron mucha importancia económica. La población del campo no sólo se dedicaba a atender los viñedos, sino también a regar los abundantes huertos de alubias, patatas y boniatos, junto a las higueras y los algarrobos. En la actualidad, destaca el turismo y la pesca. En la zona de "Las Lagunas", encontramos una mayor actividad industrial y comercial. El golf es uno de los deportes más destacados, abundando los campos en gran parte de las urbanizaciones, situadas por todo el término municipal.